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sábado, 18 de septiembre de 2010

La abuela de Jerez

La abuela de Jerez tiene ya 90 años. En realidad tiene 90 años y casi un par de semanas, pero lo celebramos el domingo pasado. La madre de mi padre, mujer admirable donde las haya con el único inconveniente de que no tiene la cabeza dura (no como nosotros sus descendientes, claro está), siempre ha sido "la abuela de Jerez". Y es que durante muchos años vivió allí con mis tíos y mis primos. Por otro lado, estaba también "la abuela de Vélez" (por Vélez Málaga), la madre de mi madre, que tiene 82 años y nos enterrará a todos.

La verdad es que ya hace tiempo que no nos referimos a ellas como "de Vélez" o "de Jerez", supongo que, en parte, porque mis primos llevan 20 años en Málaga. Pero sí, cuando nos referimos a una y no queda claro cuál es, además del "esta" (la de mi madre, que vive aquí) y de "aquella" (la de mi padre), a veces usamos el topónimo correspondiente.

Pero a lo que vamos, mi abuela tiene muchísima cosas buenas y, evidentemente, algún que otro defectillo. Los defectillos a veces son defectillos y a veces son causa del carnet de identidad que sostiene siempre que se le pregunta que ella nació en 1920 y no hay forma de que cambie su versión. 1920, vivió la Guerra Civil española desde Tetuán, adonde su padre había emigrado y donde conoció a Domingo, mi abuelo paterno que murió un año antes de nacer yo. Vivió muchos años allí y, en 1959 creo, volvieron para España. Hassan II, antes de convertirse en rey, consiguió que muchos españoles, espoleados por el miedo, malvendieran lo que tenían allí y regresaran a España. Entre ellos estaban mis abuelos, con una gran casa donde tenían también la bodega que regentaba mi abuelo y con proyectos de ampliarla. Como digo, malvendieron todo aquello y vinieron para aquí ... afortunadamente o yo no hubiera nacido.

Aquí compraron un piso y se metieron en otro que fueron pagando con lo que sacaban del bar que pusieron. En el piso vivían mis abuelos, mi padre y, durante algún tiempo, mis tíos antes de viajar primero a Albacete y luego a Jerez. Con el otro piso no sé muy bien qué hicieron pero creo que lo alquilaron ... y tuvieron problemas. Fue uno de estos pisos de renta antigua; los inquilinos no pagaban prácticamente nada y al final les costó sangre, sudor, lágrimas y dinero sacarlos de allí.

Mientras tanto, en el bar estaban trabajando tal como no estamos acostumbrados a trabajar hoy en día. Ella ha comentado muchas veces que ha tenido que hacer ollas y ollas de callos (buenísimos) que se vendían como tapas y que, poco a poco, iban ayudando a pagar esa letra. Unos años después, mi padre conoció a mi madre y, en un momento dado, planteó al suyo la posibilidad de vivir en la casa con ellos, habida cuenta de que él trabajaba en el bar y no recibía ninguna contraprestación monetaria. Mi abuelo, que no sé si había hecho bien teniéndolo sin pagarle, sabiamente le dijo que: "el que se casa quiere casa". Y así mi padre empezó a trabajar por cuenta ajena.

En el 75, se casan mis padres y no lo celebran porque mi abuelo había fallecido un par de meses antes. Tras la muerte de mi abuelo y la boda de mi padre, mi abuela se va con su hija que ya tenía dos hijos. Ahí se convierte en "La abuela de Jerez". Para mí, cuando era un niño, siempre suponía un evento especial el que ella viniera, normalmente en verano o en navidades. Una vez, me trajo un camión de juguete, muy grande, con la bañera amarilla, que me encantó. No era de su parte sino de parte de "la abuela de Alicante", la madre de mi tío y abuela de mis primos. Parece ser que era una mujer con bastante genio y un par de ... sílabas, "mu" y "jer" pero también una buena persona con detalles como ese pues yo ni la conocía. Años después, a causa del azúcar, primero perdió una pierna, luego otra y finalmente falleció. Una lástima.

Volviendo a la historia, si no recuerdo mal, sobre el 90 mis tíos vuelven a Málaga. Vienen por trabajo, vienen también por amistad y familia y vienen también porque digamos que a mi tío ya lo conocían en Jerez :-). Antes de eso, tendría yo unos 8-9 años cuando pasé un verano, supongo que sería un mes allí con ellos. Estuve en la base militar en cuya piscina aprendí a bucear. Más tarde, quizás ese mismo verano, fui a la playa y descubrí que allí flotar me resultaba mucho más fácil, dentro del escaso nivel de flotabilidad que siempre ha caracterizado a mi cuerpo. Así que se puede decir que allí aprendí a nadar lo poco que sé.

Con el traslado, obviamente, mi abuela dejó de ser "la de Jerez" pero siempre ha tenido una característica. Siempre estuvo ahí para todo el mundo. Estuvo cuidando a mis primos cuando murió mi tía de cáncer de pecho. Estuvo cuidándolos cuando murió mi tío. Lo de mi tía fue el primer año de facultad, en mayo de 1995, si no recuerdo mal. Hace por tanto 15 años. Entonces mi abuela tenía 75 pero estaba plena de facultades. Lo de mi tío fue tres años después. Ella todavía no tenía 80 pero seguía al pie del cañón. En el 99 se casó mi prima pequeña y se la llevó con ella a su casa. Fue lo mejor que pudo hacer y creo que nunca le estaremos lo suficientemente agradecidos.

Desde entonces mi prima y su familia la han cuidado los ratos que mi abuela no los cuidaba a ellos. Lamentablemente sus hermanos no le han dado tantas alegrías. Más bien al revés. Pero bueno, eso mejor olvidarlo. En 2002, 2003 y 2004 los veranos fueron complicados y mi abuela acababa ingresada por problemas intestino-estomacales. En septiembre de 2004 yo adelanté mi vuelta desde Chicago pues estaba muy mal y no sabíamos si saldría de esa. Lo hizo, vaya si lo hizo. Y de paso yo tuve la experiencia de volar desde Chicago a Madrid entre el 10-S y el 11-S y volar desde Madrid hasta Málaga el 11-S. Esa misma noche, aprovechando el jet-lag, me quedé a cuidarla.

Luego, ha tenido sus achaques pero yo diría que lo normal en una persona de su edad. Cada vez está más torpe y tiene peor memoria; hoy decía que el domingo pasado fue la primera vez que le habían celebrado el cumpleaños. No, desde su 80 cumpleaños aproximadamente, se celebra cada año y, casi siempre, en casa de mi prima. Unas veces habremos comido pizza, otras chino, otras bocadillos pero siempre lo celebramos o, mejor dicho, mi prima siempre se lo celebra. Y este domingo pasado celebró el nonagésimo aniversario. Con mareos, "como si estuviera en un barco", con pocas fuerzas, "con una flojedad en las piernas grande" y con el resto de letanías que recita pero mejor de lo que cabría esperar a su edad.

El domingo pasado llegamos a la celebración, un pelín tarde pero llegamos. Había paella con chorizo; muy buena la combinación, por cierto. Había bebidas, tortilla, "quiche Lorraine" o "quisa", tal como la llama mi madre y, por supuesto, tarta. Ella sopló sus velas, el 9 reutilizado de los 89 y que reutilizaremos el año que viene para los 91, esperemos. Lo pasó muy bien, rodeada de amigos, de familiares, de sus nietos que es como si fueran sus hijos y de sus bisnietos que es como si fueran sus nietos. Por último, una tarjeta de cumpleaños llena de deseos y firmas. Mis primas expresando lo que sentían (en el caso de mi prima Inma no era necesario, ella lo demuestra día a día), mis tíos y primos por parte de mi madre, mi madre comentando lo magnífica persona que es (no he visto otras suegra y nuera llevarse mejor), mi mujer comparándola con la Reina Sofía, etc.

La mía, muy cortita: "Para la "Abuela de Jerez". Que nosotros estemos siempre ahí, igual que lo has estado tú."

Un saludo, Domingo.

Más sobre el perro-gato

Parece mentira; una semana después y todo sigue prácticamente igual. Bueno, para el perro-gato hay una diferencia y es que ya no podrá tener descendencia. A él no debería importarle y a sus dueños (me resulta raro considerarme el dueño de una vida, al menos escribirlo) teóricamente debería facilitarles la vida. Pero no, no está del todo claro por qué pero ayer volvió a hacerlo. De hecho, ayer fue, posiblemente, el gran día de madre e hijo.

Cuando salí por la mañana para el trabajo, fue abrir la puerta y la perra, que estaba esperando, intentó entrar como alma que lleva el diablo. Lo impedí y la mandé, sin éxito, a su casa. En cierta forma era comprensible porque había estado lloviendo durante toda la noche y, a pesar del toldo, de la caseta y de su gusto por el agua, se ve que los truenos pueden todavía más.

Al mediodía, llegué y me encontré con que ambos habían pasado una mala mañana. Tanto que no habían podido contener el esfínter anal y habían dejado allí un par de regalitos a los que solo faltaban sendos lazos. Como decía aquel antiguo chiste, de haber pasado por allí un policía, no le hubiera quedado más remedio que dar parte ... porque para el defecante hubiera sido mucho.

De forma que, habida cuenta de que seguía lloviendo y de que los esfínteres debían estar ya más relajados, no los sacamos en ese momento. No sé si fue un error o no pero el caso es que un par de horas después salimos a recibir a una visita y nos encontramos con que, fuera de la puerta, solo nos esperaba la madre; ni rastro del hijo. Enjaecé a la perra, cogí el arnés del hijo y salí a buscarlos. Ella me dio un buen paseo por donde quiso y todavía no tengo claro si lo buscó o no a pesar de que yo, cada cierto tiempo, le daba a oler el arnés.

Lo más curioso es que ella tiraba como una desesperada e incrementaba el paso cuando yo nombraba a su hijo. Pero nada, aquello dio para que ella se relajara un poco en el césped primero y luego en mitad de la calle, aunque no en gran cantidad. Me sentí fatal porque siempre vamos preparados para estas situaciones pero esta vez no. Es más, la textura del problema era tal que hubiera sido un problema intentar recoger el problema.

En cualquier caso, tras lo que pudieron ser veinte minutos de búsqueda infructuosa, regresamos a casa con la esperanza de que él llegara también en poco tiempo. Efectivamente, él ya había llegado y ya tenía la correa convenientemente atada a la reja. Además, vimos las pruebas incriminatorias, la tierra en la jardinera, las plantas rotas ... Toby, de esta no te libra ni Perry Mason, abogado elegido sobre todo por lo de Perry más que por lo de Mason :-).

Así que nada, esperemos que solo sean los últimos estertores de las hormonas que todavía tiene en su torrente sanguíneo. Por otro lado, no sé, quizás tendremos que pensar en algo para dificultar la huida porque lo que está claro es que el perro: uno, ya ha aprendido cómo se sale, dos, no tiene dificultad para hacerlo ni ciencia para pensar que luego no va a poder entrar.

En fin, a ver qué pasa.

Un saludo, Domingo.

sábado, 11 de septiembre de 2010

El perro-gato

Ayer el perro se convirtió en perro-gato. Una vecina se lo encontró fuera de la casa: había saltado el muro. Vale, salir podía haber salido de forma más o menos fácil apoyándose en la jardinera, luego en el muro y luego abajo. Pero es que luego, intentando entrar de nuevo, como no era capaz, se dedicó a investigar diferentes formas. La primera fue arañar la puerta de la casa hasta dejarla hecha unos zorros. La segunda fue dar un salto de 1,80 metros o así y encaramarse al muro de la casa vecina. Una vez ahí, no vio posibilidad de llegar a la suya y se quedó en stand-by.

En esto, la vecina lo vio, si es religiosa se santiguaría y diría algo parecido a "¡¡¡Madre mía del amor hermoso!!!", lo agarró y lo bajó. Tras eso, lo subió encima del muro de mi casa y de ahí él solo encontró el camino de vuelta. Eso sí, el muy tuno no me dijo nada cuando yo, sin haber comido, los saqué a pasear. Sí que noté que intentaba marcar los sitios pero no soltaba ni una gota de pis, algo completamente no habitual en él. Luego supe por qué. Normal, si había pasado toda la mañana marcando territorio y, posiblemente, buscando alguna hembra que le ayudara a preservar su carga genética.

Por este motivo, habida cuenta de que el perro-gato tiene muy mala cabeza y muy buenas patas, no ha quedado más remedio que tenerlo unos días atado y sacar cita para esterilizarlo. Esperemos que con eso se resuelvan sus problemas ... y los nuestros.

Un saludo, Domingo.

jueves, 9 de septiembre de 2010

Tanto te doy, tanto vales

Tanto tienes tanto vales, se ha dicho siempre. Es una forma de valorar a la gente, triste, pero popular. No solo eso, por muy bien que estemos, solo necesitamos ver a otra persona que está mejor para que nos pongamos a hacer cábalas o simplemente se nos vaya momentáneamente la cabeza deseando tener algo más de lo que tenemos. Esto, no es necesariamente malo. Más bien al revés. Es más que legítimo querer prosperar en la vida pero ni conviene obsesionarse con ello ni está del todo claro que sea bueno desear algo que no te aportaría más de lo que ya tienes.

Estos sentimientos encontrados los tengo cuando, de vez en cuando, salgo a pasear al perro-gato y a su madre por alguna de las zonas residenciales que están cerca de mi casa. En esas zonas, es fácil encontrarse desde adosados como el mío, peores diría yo, con un cierto aspecto a "adosado-colmena" hasta casas majestuosas. Y en medio se pueden ver pareados o chalets con sus zonas verdes, sus piscinas o, directamente, una cierta extensión de campo.

No puedo evitar pensar entonces en que, hace 20 años, me hubiera podido permitir algo así. Hoy en día es poco más que una utopía. Es más, paguemos primero la hipoteca que luego, con 60 años, ya habrá tiempo de ver si te quedan ganas de cambiar de casa :-). Pero tampoco puedo evitar pensar que el 90% por decir algo, de las personas, tiene que arreglárselas en un piso, posiblemente pequeño, en una abarrotada ciudad. Yo mismo había vivido siempre en un piso y tenía como ilusión poder vivir en una casa. La ilusión, afortunadamente, pudo hacerse realidad.

Así que ... "Tanto tienes, tanto vales", aunque no sea este precisamente el título de la entrada. El título tiene relación con una entrada anterior sobre la empresa privada, o al menos la mía. En la empresa, cada año hay un proceso de evaluación que desemboca en un "proceso económico" que es el que decide cuánto dinero se le sube a cada persona. Por lo que he podido ver, el proceso en otras empresas es bastante similar por lo que cabe esperar que las consideraciones que voy a hacer, también les sean aplicables.

Para no extenderme mucho, digamos que lo que se hace es agrupar a las personas de una misma categoría según el rendimiento del año, formando los siguientes grupos:
Por debajo de lo esperado.
En lo esperado.
Por encima de lo esperado.
Sensiblemente por encima de lo esperado.

Y luego ya, cada persona, tiene una subida salarial que se supone que es más o menos similar que la del resto de personas del grupo, aunque no siempre es así.

Cuando ha llegado ese momento, siempre se nos ha comentado que no digamos nada, ni sueldo ni grupo ni nada. Evidentemente es algo que no contribuye a crear un buen ambiente porque todos pensamos que somos mejores que los demás o al menos que la mayoría. También evidentemente, la gente no hace caso. Yo, casi siempre he hecho caso. Más que nada porque he considerado que lo que cobre el de al lado no me incumbe. Si cobra más que yo, pues algo habrá hecho, aunque sea irse de cañas con el jefe. Si esas son las reglas del juego y lo juega mejor que yo ... pues ya está.

Pero, también he dicho casi siempre que la comparación es buena porque te permite saber lo que piensa la empresa de ti y de tu trabajo. Prácticamente todas las cosas de la vida no son cosas buenas o malas sino mejores o peores. Y creo que es justo saber qué opinión "real" tiene de ti la empresa porque la opinión "oficial" se reduce a un papelito hecho con prisas en el que se suelen decir muchas trivialidades. En cambio el sueldo y el grupo son dos cosas objetivas e incluso significativas.

Hasta hace dos años, mi opinión sobre la opinión que la empresa tenía de mí era que me valoraba. Unas veces un poquito más, otras un poquito menos pero pensaba que mi trabajo era reconocido y/o recompensado. Hace dos años sentí cómo se debilitaba el "amor" que me profesaban. Lo achaqué a una circunstancia puntual, primer año en la categoría actual y alguna que otra cosa más. Pero a pesar de todo, tampoco es que fuera preocupante. Llegó el año pasado y entonces sí que me preocupó más.

No en el tema del sueldo, la verdad, porque el año pasado todos o prácticamente todos vimos nuestro salario congelado. Sino en términos de reconocimiento. No sentí que mi trabajo fuera reconocido, incluyendo el esfuerzo personal que supuso el que me mandaran 5 meses a Bratislava. Y este año, de reconocimiento nada. No han tenido en cuenta Bratislava y supongo que sí que han tenido en cuenta otra serie de cosas.

No es algo que me haya pillado por sorpresa. Ni mucho menos. Además, si se ve el cuadro con un poco de perspectiva hasta podría encontrársele una razón y una buena razón que redundaría en mi propio bien personal. Lo que ocurre es que no sé si el motivo pudiera ser ese u otro y tampoco tengo claro que me lo vayan a decir. En cualquier caso, sea de una forma o sea de otra, la verdad es que es una decisión que no me ha afectado, posiblemente por lo asumida que la tenía. Y no solo eso, esa sensación de desapego por parte de la empresa no es algo nuevo. También se produjo hace años y luego las cosas se recondujeron. El trabajo en una empresa no deja de ser parte de la vida de uno y como todo en esta vida, es susceptible de dar cambios bruscos. Un cambio brusco, por ejemplo, es que, antes de ayer el perro-gato no tenía cita cita para ser castrado, pero ya ayer sí. Esperemos que, con eso, podamos estar todos más tranquilos.

Un saludo, Domingo.

Cuando la vida no es sencilla II

Hace poco más de un año, escribía una entrada titulada: Cuando la vida no es sencilla. Lamentablemente este año toca escribir la segunda parte. O la tercera, según se mire. En tres años, tres mascotas, una por parvo-virus y dos por atropello.

http://donmingo-2008.blogspot.com/2008/08/parvo-virus.html
http://donmingo-2009.blogspot.com/2009/05/cuando-la-vida-no-es-sencilla.html

Tengo que buscar alguna foto en el otro ordenador, alguna foto en la que aparezca la pequeña Tina. Tina era la más pequeña, de tamaño, de una camada de cinco. Su madre, siendo poco más que una cachorra, conoció varón en el sentido bíblico de la palabra y poco tiempo después tenía que compaginar sus juegos con el cuidado de cinco crías. Poco después sería esterilizada. De sus crías, tres encontraron acomodo en amantes (esperemos) familias y dos en la casa familiar. Una de ellas era precisamente Tina. Tina destacaba por su altura ... bueno por la ausencia de ella.

Pero no era lo único, en cuanto salía a recibirte, dejaba un reguero de pis por el suelo ya que sus ataques de alegría y el control del esfínter no se llevaban demasiado bien. Pero, sin duda, destacaba por lo cariñosa que era. Al contrario que la hermana y la madre, de carácter más bien agrio, ella hacía las delicias de las señoras (y alguna señorita de la casa). Además, llegada la hora, ella misma se metía en el cuarto donde dormía. Los demás perros jamás han querido dormir encerrados, todo lo contrario.

Tina solo tenía una cosa mala, vivía en el campo. En el campo con acceso libre a una carretera que un año antes se cobró la vida de otro cachorro, esta vez un gato. El caso es que, de haber sido su madre o su hermana, sin duda que lo hubieran sentido. Pero siendo ella lo han sentido todavía más. Hoy, hay una mujer menos en esa casa. Las que compartían lazos de sangre con ella posiblemente la olviden pronto. Las humanas tardarán algo más en hacerlo aunque finalmente también lo harán. No en vano, nosotros seguimos, preocupados a veces por tonterías; ellos descansan en paz.

Un saludo, Domingo.

sábado, 4 de septiembre de 2010

La empresa privada y las crisis

Rompo parcialmente mi voto de no comentar cosas del trabajo, aunque en qué medida. Conforme vaya escribiendo supongo que iré perfilando lo que quiero y no quiero decir. Por lo pronto, el título de la entrada está mal porque no es "la empresa privada" en general, sino la empresa en la que yo trabajo, digamos que una filial de una gran internacional.

El caso es que la filial española ha tenido algún que otro comportamiento digno de mención. Estando en Bratislava, me llamó la atención la claridad con la que trataban su situación. Y eso que todavía no había visto los cambios que se producirían aquí en España en el, digamos, proceso de comunicación con los empleados. Pero en poco tiempo se vio que ambas filiales eran como el día y la noche. Solo se me ocurre calificar la situación española de oscurantismo pero entiendo que eso es por mis carencias de vocabulario. Tiene que haber alguna otra expresión, negro como la boca de un lobo, negro como el espacio exterior, negro como un agujero negro ... algo así. En cualquier caso, creo que se entiende.

Hasta el año pasado, nos comunicaban las promociones y los aumentos de sueldo a finales de Julio, principios de Agosto en el peor de los casos. Y los jefes hacían lo posible, o lo parecía, para que todo el mundo recibiera su comunicación. El año pasado todo cambió. Por lo pronto nos dijeron que nada de Julio/Agosto, sino a principios de Septiembre como el resto de empresas cuya matriz es estadounidense. Por lo visto solo España y Portugal tenían esa mala costumbre de irse de vacaciones sabiendo lo que iban a cobrar a la vuelta y con esa decisión, por fin había sido convenientemente subsanada la desigualdad.

Eso sí, la comunicación no fue el día 1 de septiembre, ni siquiera cuando un error permitió, momentáneamente, a algunos empleados acceder a parte de la información. La comunicación de promociones quizás sí. La de las promociones de jefes seguro que sí porque eso corresponde a la matriz y ahí son puntuales. La de los cambios salariales tuvo lugar el día cuatro, un viernes, por la tarde, cuando ya no había nadie trabajando.

Quedaba ver qué pasaría esta año. Yo apostaba por que se volvería a repetir el numerito. Algunos decían que el miércoles día 1 porque además la web estuvo inactiva durante un tiempo. Finalmente no fue el miércoles, ni el jueves ... pero tampoco gané la apuesta. Tampoco fue el viernes ni por la tarde ni por la noche ni nada, a pesar de que la web volvió a estar inactiva. No sé cuándo será pero intuyo que posiblemente el lunes.

¿Por qué?. Pues la verdad es que no lo sé pero puede que sea una estrategia empresarial. Hasta hace un par de años, casi todas las acciones que se tomaban iban encaminadas a "parar la rotación". No la de la Tierra, claro está, la de los empleados que abandonaban la empresa en busca de una competencia, normalmente, mejor pagadora. Por esto tenía sentido dar las subidas justo antes de las vacaciones. Era un hecho que mucha gente se mosqueaba, expresaba su intención de abandonar el barco, pero tras unas merecidas y relajantes vacaciones, pensaban que la situación tampoco era tan mala y se quedaban.

Pero el año pasado estábamos en crisis y este la situación no es excesivamente mejor. Este cambio de estrategia, aparte del "alineamiento" de compañías, que podría ser algo impuesto, pareciera que tiene como objetivo que la gente espere durante una semana, se entere de lo que hay un lunes y, sin fin de semana reparador de por medio, enfurezca y se ponga a echar CVs a diestro y siniestro, que Dios mediante, acaben fomentando la rotación.

Lo malo es que esto es como los inventos, genuinos, de los que hablan cada cierto tiempo y que permiten condensar el agua de la atmósfera de forma que podríamos beberla. En seguida el periodista de turno habla de una posible aplicación en las zonas desérticas para acabar con los problemas de agua. Mire usted, el aparato, que funciona perfectamente, se lo lleva usted a Irlanda y le saca agua de donde quiera, pero ese agua no es necesaria pues si hay agua en la atmósfera, también llueve más y hay ríos y lagos y agua en abundancia. Y en el Sáhara, la máquina tras tres días funcionando sería un milagro si pudiera condensar un dedal de agua. Pues eso, si los responsables españoles quisieran con estas medidas que la gente se vaya; con la situación actual, me da que no lo van a conseguir.

Un saludo, Domingo.

Enseñanzas

Como todas las noches que no me acuesto excesivamente tarde o no estoy mortalmente cansado, anoche leí un rato. Seguí con las aventuras de ese ingenioso hidalgo y en particular estaba con los consejos que Don Quijote le dio a Sancho antes de que este se fuera a ser gobernador. Y encontré otro motivo más por el cual hay que reconocer que se trata de un magnífico libro, un grande libro, digno, dignísimo de ocupar el sitio que ocupare en todas las lenguas donde hubiere sido traducido y otras más en las que aún no lo hubiere :-).

El caso es que pensé que los consejos de Don Quijote serían un sensacional punto de partida para una entrada del blog. Así que vamos a ello. El texto, cortesía de Google Books para lo bueno y para lo malo, en azul. Solo una cosa, vaya ante todo que son comentarios actuales a formas de entender actualmente algo escrito hace 500 años. No entraré a valorar la vigencia que tenía en su momento sino la actual. Espero que no le siente mal a Cervantes :-).

Primeramente, ó hijo, has de temer á Dios; porque en el temerle está la sabiduría, y siendo sabio no podrás errar en nada.
Bien, la segunda parte es discutible pero podría aceptarla entendiéndola algo así como "siendo sabio, quizás te sientes sobre el hormiguero, pero no permanecerás en él". Sobre lo de temer a Dios, ahí cada uno tendrá su opinión propia. Incluso cuando pensaba que lo más lógico era ser agnóstico pero me consideraba creyente, no comprendía eso de ser "temeroso de Dios". Pensaba que debía hacer las cosas de forma correcta por mí mismo, no por miedo a nadie.

Lo segundo, has de poner los ojos en quien eres, procurando conocerte á tí mismo, que es el mas difícil conocimiento que puede imaginarse. Del conocerte saldrá el no hincharte como la rana, que quiso igualarse con el buey; que si esto haces vendrá á ser feos pies de la rueda de tu locura la consideracion de haber guardado puercos en tu tierra.Asi es la verdad, respondió Sancho, pero fue cuando muchacho; pero despues algo hombrecillo, gansos fueron los que guardé, que no puercos; pero esto paréceme á mí que no hace al caso, que no todos los que gobiernan vienen de casta de reyes. Asi es verdad, replicó Don Quijote, por lo cual los no de principios nobles deben acompañar la gravedad del cargo que ejercitan con una blanda suavidad, que guiada por la prudencia los libre de la murmuracion maliciosa , de quien no hay estado que se escape.Haz gala, Sancho, de la humildad de tu linage,y no te desprecies de decir que vienes de labradores; porque viendo que no te corres, ninguno se pondrá á correrte, y precíate mas de ser humilde virtuoso, que pecador soberbio. Innumerables son aquellos que de baja estirpe nacidos han subido á la suma dignidad pontificia é imperatoria, y desta verdad te pudiera traer tantos ejemplos que te cansaran.
Quizás pudiera haber troceado el párrafo y hasta cercenar alguna cosilla pero he preferido dejarlo así. Lo importante aquí es que ahora con más sentido, pues hay más gente que antes, es raro encontrar a alguien de valía situado en un puesto de alta responsabilidad. De los partidos políticos mejor ni hablar, el nepotismo sigue funcionando y las ventajas que proporcionan las cunas quizás son solo comparables a las que proporcionan las camas. Por este motivo, independientemente del peldaño de la escalera en el que estés subido, creo que Don Quijote está más que acertado al decir que nunca debemos olvidar de dónde venimos y, que lo único importante es conducirse de forma honesta, por rebajar un poco ese "virtuosa" que utiliza él, por la vida.


Mira, Sancho, si tomas por medio á la virtud, y te precias de hacer hechos virtuosos, no hay para que tener envidia á los que los tienen príncipes y señores, porque la sangre se hereda, y la virtud se aquista, y la virtud vale por sí sola lo que la sangre no vale.Siendo esto asi, como lo es, si acaso viniere á verte cuando estés en tu ínsula alguno de tus parientes, no le deseches ni le afrentes, antes le has de acoger, agasajar y regalar, que con esto satisfarás al cielo, que gusta que nadie se desprecie de lo que él hizo, y corresponderás á lo que debes á la naturaleza bien concertada.
Abunda en lo mismo aunque aprovecharé para comentar otra cosa. Lo primero: aquistar. Lo segundo, no es la primera vez que defiendo, aquí y en otros foros, algo que por otra parte no debe causar extrañeza: estoy mucho más orgulloso de las cosas que he conquistado que de aquellas que me han sido otorgadas. En este sentido, uno de mis miedos es que mis hijos, cuando los tenga, vean como normal lo que tantos hijos ven hoy en día y es que no tienen necesidad de ganarse nada: se les da todo.

Si trujeres á tu muger contigo (porque no es bien que los que asisten á gobiernos de mucho tiempo estén sin las propias) enséñala, doctrínala y desbástala de su natural rudeza, porque todo lo que suele adquirir un gobernador discreto suele perder y derramar una muger rústica y tonta.
Si acaso enviudares (cosa que puede suceder), y con el cargo mejorares de consorte, no la tomes tal que te sirva de anzuelo y de caña de pescar, y del no quiero de tu capilla; porque en verdad te digo que de todo aquello que la muger del juez recibiere ha de dar cuenta eí marido en la residencia universal, donde pagará con el cuatro tanto en la muerte las partidas de que no se hubiere hecho cargo en la vida.
Este párrafo me resulta muy gracioso. Pero lo mejor de todo es que existen contemporáneos nuestros que lo firmarían sin rubor, no en vano, no hace tanto tiempo que vemos las cosas de otra manera.

Nunca te guies por la ley del encaje, que suele tener mucha cabida con los ignorantes que presumen de agudos.
Supongo que se refiere a no confiar en el criterio de autoridad y más concretamente en que el criterio de cualquiera es bueno. Haría falta añadir que tampoco hay que pensar lo contrario, que el único criterio bueno es el nuestro.

Hallen en tí mas compasion las lágrimas del pobre; pero no mas justicia que las informaciones del rico.
Y aquí es donde viene lo mejor, lo que me decidió a escribir sobre ello. No sé si comentar las frases porque realmente se comentan solas. ¡¡¡Podemos aprender tanto de un libro!!!. Lástima que haya tardado tanto tiempo en leerlo.

Procura descubrir la verdad por entre las promesas y dádivas del rico, como por entre los sollozos é importunidades del pobre.
Esto me viene a recordar un caso curioso, por no decir lamentable, que se da casi en cualquier servicio de atención al público, empezando por los profesionales de la sanidad. No termino de entender por qué, al menos en España el que más chilla tiene la razón y te atienden mejor si armas un buen jaleo. Sí, ya sé, existen razones de imagen ... bueno, fundamentalmente razones de imagen. La gente no quiere ser percibida como alguien que hace dejación de su deber o no quiere ser tachada de racista o simplemente es más cómodo atender a esa persona y acabar con la molestia a corto plazo.

Cuando pudiere y debiere tener lugar la equidad no cargues todo el rigor de la ley al delincuente, que no es mejor la fama del juez riguroso que la del compasivo.
Si acaso doblares la vara de la justicia, no sea con el peso de la dádiva, sino con el de la misericordia.
No viene a cuento de nada pero en "Scaramouche", película que mi padre tenía grabada y ponía de vez en cuando, enseñan esgrima al protagonista, André Moreau/Stewar Granger, que quería vengar la muerte de su amigo "Marcus Brutus (pseudónimo)" a manos del que luego descubriría que era su hermano, Noel De Maynes/Mel Ferrer. De hecho acaba acudiendo al maestro que enseñó a su enemigo. Este, en una de las primeras lecciones, si no la primera, le dice que tiene que tratar la espada como a un pájaro: "Si lo asís demasiado fuerte, lo matáis, si demasiado flojo, saldrá volando". Como todo en esta vida, la justicia también es una cuestión de proporción y la solución para uno no vale para todos. Así nos va, con enfermos mentales que salen de la cárcel y vuelven a matar y con personas que han tenido mala suerte en la vida y en la cárcel se hacen peores. Ojalá nuestro sistema penitenciario (por cierto, yo sí creo que el adjetivo es correcto), hubiera aprendido algo del Quijote.

Cuando te sucediere juzgar algun pleito de algun tu enemigo, aparta las mientes de tu injuria, y ponlas en la verdad del caso.
Bueno, aquí en realidad debería desentenderse del caso, no como Garzón, y que sea otro el que proporcione justicia. En caso en que no sea posible, evidentemente hay que hacer un gran esfuerzo para intentar conseguir una objetividad que no se tiene.

No te ciegue la pasion propia en la causa agena, que los yerros que en ella hicieres las mas veces serán sin remedio, y si le tuvieren será á costa de tu crédito y aun de tu hacienda.
Esto me recuerda a otro clásico, el Señor de los Anillos y el mejor alegato contra la pena de muerte que, posiblemente, jamás se haya escrito. En versión original: Many that live deserve death. Some that die deserve life. Can you give it to them, Frodo? Do not be too eager to deal out death in judgment. Even the very wise cannot see all ends.

Si alguna muger hermosa viniere á pedirte justicia, quita los ojos de sus lágrimas, y tus oidos de sus gemidos, y considera despacio la sustancia de lo que pide, si no quieres que se anegue tu razon en su llanto y tu bondad en sus suspiros.
Al que has de castigar con obras no trates mal con palabras, pues le basta al desdichado la pena del suplicio sin la añadidura de las malas razones.
Al culpado que cayere debajo de tu juridicion considérale hombre miserable, sujeto á las condiciones de la depravada naturaleza nuestra, y en todo cuanto fuere de tu parte, sin hacer agravio á la contraria, muéstratele piadoso y clemente, porque aunque los atributos de Dios todos son iguales, mas resplandece y campea á nuestro ver el de la misericordia que el de la justicia.
Posiblemente comentado con anterioridad.

Si estos preceptos y estas reglas sigues, Sancho, serán luengos tus dias, tu fama será eterna, tus premios colmados, tu felicidad indecible, casarás tus hijos como quisieres, títulos tendrán ellos y tus nietos, vivirás en paz y beneplácito de las gentes, y en los últimos pasos do la vida te alcanzará el de la muerte en vejez suave y madura , y cerrarán tus ojos las tiernas y delicadas manos de tus terceros netezuelos. Esto que hasta aqui te he dicho son documentos que han de adornar tu alma: escucha ahora los que han de servir para adorno del cuerpo.
Esto es posiblemente materia para otra entrada muy diferente, una que trate sobre la muerte en profundidad. Hasta ahora solo he comentado cuando la muerte ha rozado (con eso basta) a algún familiar o algún conocido. Sin duda es un tema tabú. Actuamos como si no existiera y luego pasa lo que pasa. Pero eso, como digo, será otro día, aunque no sé cuándo.

Un saludo, Domingo.